El cambio climático es una realidad que ya se está haciendo sentir en España. Los últimos años han sido los más calurosos de la historia, y las previsiones apuntan a que la situación empeorará en los próximos años.
Según el informe de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), la temperatura media en España ha aumentado 1,3 grados centígrados desde 1981. Este aumento se ha acelerado en las últimas décadas, con un incremento de 0,2 grados centígrados por década desde 1991.
Este aumento de las temperaturas está provocando un aumento de la frecuencia e intensidad de los fenómenos meteorológicos extremos, como las olas de calor, las sequías, las inundaciones y los incendios forestales.
En 2023, España vivió la ola de calor más intensa de la historia, con temperaturas que superaron los 45 grados centígrados en algunas zonas del país. Esta ola de calor provocó la muerte de más de 1.000 personas.
Además, España también ha sufrido una sequía histórica en los últimos años, que ha provocado pérdidas millonarias en la agricultura y la ganadería.
Las previsiones apuntan a que la situación empeorará en los próximos años. Según el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC), la temperatura media en España podría aumentar hasta 4 grados centígrados para finales de siglo.
Este aumento de las temperaturas tendría consecuencias devastadoras para España, como un aumento de la mortalidad, la pérdida de biodiversidad, la desertización y la escasez de agua.
Es necesario tomar medidas urgentes para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y mitigar los efectos del cambio climático.